
Un ejemplo en estos primeros días fue que en ciertos deportes los considerados como grandes favoritos, fueron eliminados en primera ronda, incluyendo nuestra selección de fúbol; segun la investigación es la primera vez en que se usan registros semanales de 18 atletas de élite que mantuvieron un buen desempeño durante unos años, por lo menos dos desempeños de un nivel muy elevado.
Si bien no se reveló el nombre de los atletas monitoreados, se pudo adelantar que hasta la fecha muchos de estos deportistas incluidos latinos y españoles lograron algunas medallas o posiciones de honor durante los JJOO; la idea aquí era analizar y comprender como trabajaban los atletas tanto en modalidades colectivas o individuales, percibiendo que factores podrían proporcionar el rendimiento de excelencia y destacarlos de los restantes que no consiguen las mismas calificaciones.
No existe un único factor-llave que justifique el hecho de que un atleta de élite mantenga su rendimiento, pero todos los factores psicológicos, sociales o de contexto y de práctica son importantes se interrelacionan continuadamente, y cada uno dentro de un todo cumple su función.
Para llegar a estos resultados se hicieron tres sub-estudios que integrados previeron seguir el entrenamiento de los atletas sometiéndolos a entrevistas estructuras, en segundo lugar se evaluó las características y los índices psicológicos con cuestionarios adaptados a cada deporte; una tercera fase se centró en la práctica y el entrenamiento basados en los registros semanales.
Los investigadores europeos tuvieron que hacer un diario durante siete días sobre las actividades que realizaban, y su duración, así como la evaluación del esfuerzo físico y mental (concentración), el nivel de relevancia de la actividad para la modalidad, la satisfacción final y el placer durante el entrenamiento fueron medidos y puestos a consideración.
Además se tuvo en cuenta una red de soporte financiero, técnico, y emocional de cada atleta; también se señala que cada nivel de personalidad permitía delinear como se diferenciaban en sus espíritus de sacrificio, lo que implica dejar de lado la familia, los amigos o algunos proyectos personales acarreando a la vez confianza y perfeccionamiento saludable.
Dentro del estudio se puso un enfoque especial a un mal desempeño que fue evaluado por cada atleta que observando que casi todos tomaban este punto como ‘algo a mejorar’, y siendo un impulso para continuar y autoevaluarse; las conclusiones definitivas fueron que ciertos atletas que visan el éxito con seriedad no se contentan con la derrota y aunque la cuestión física, relacionada con factores genéticos, también es relevante, no es abordada en este estudio.
- Los deportistas destacan la necesidad clara de trabajar continuamente para mejorar por sí mismos.
- La cantidad de tiempo y calidad del entrenamiento son exigentes en términos de esfuerzo y concentración, pero a pesar de eso dan placer.
- La psicología del atleta en cambio permite que los errores sean tomados como un parámetro crítico a modificar o trasladarlos a éxitos donde el apetito por el primer puesto es el factor fundamental para encarar esta etapa de cada entrenamiento.